Adolescencia y primeras transformaciones: cuando todo empieza a cambiar
Entre los 12 y los 20 años vivimos una de las etapas más intensas de nuestra vida. Comenzamos un viaje que nos transforma física, emocional y mentalmente. Es el inicio de nuestra vida hormonal activa, y con ello llegan las primeras menstruaciones, los cambios en el cuerpo, las dudas, la exploración y, a menudo, también el desconcierto. Comprender lo que nos ocurre y tener las herramientas adecuadas nos ayuda a atravesar esta etapa con confianza, bienestar y mayor autoestima.
El despertar hormonal
Todo empieza con la menarquia, nuestra primera menstruación, que suele llegar entre los 10 y los 15 años. Este hito marca el inicio de la adolescencia y nos indica que nuestros ovarios han empezado a funcionar, produciendo estrógenos y progesterona, las hormonas responsables de nuestra salud reproductiva.
Durante los primeros años, es normal que nuestros ciclos sean irregulares, a veces largos, sin ovulación o acompañados de sangrados abundantes (hipermenorrea). También es común experimentar dolor menstrual (dismenorrea), acné, cambios de humor y, si comenzamos nuestra vida sexual, infecciones urinarias o alteraciones en la flora vaginal. Todo esto puede parecer abrumador, pero no estamos solas ni somos las únicas: es una etapa compartida por millones de chicas en todo el mundo.

Nuestro primer encuentro con la ginecología
Es en esta etapa cuando muchas de nosotras acudimos por primera vez al ginecólogo. A veces es por dolor menstrual, otras por irregularidades en el ciclo, dudas sobre anticoncepción o molestias íntimas. Este primer encuentro puede marcar una gran diferencia en cómo vivimos nuestra salud femenina: nos permite obtener información fiable, aprender a escuchar nuestro cuerpo y empezar a cuidarlo con conciencia.
También es un momento clave para hablar de nuestra salud íntima con naturalidad, perder el miedo a preguntar y empezar a entender que nuestro ciclo menstrual no es un enemigo, sino una parte fundamental de nuestra biología.
Cuidarnos desde el principio
La adolescencia es un terreno fértil para construir hábitos saludables que nos acompañarán toda la vida. Hacer deporte, llevar una alimentación equilibrada, evitar el sedentarismo y cuidar la piel son pilares fundamentales. Pero, a veces, nuestro cuerpo necesita un poco más.
En esta etapa, los complementos nutricionales pueden ser grandes aliados para aliviar molestias frecuentes, prevenir infecciones o mantener el equilibrio de nuestra flora vaginal. La clave está en elegir productos seguros, naturales y específicos para nuestras necesidades.
Desde Orissens, estos son algunos de los aliados recomendados para nosotras en esta etapa:
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Orissens Woman Menstrual Forte: pensado para aliviar las molestias menstruales de forma natural. Ayuda a reducir la hinchazón y alivia el síndrome premenstrual, algo especialmente útil cuando aún no tenemos una pauta hormonal estable.
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Orissens Woman Cistibalance Forte: ideal para tratar infecciones urinarias, especialmente si ya hemos iniciado la vida sexual o tenemos tendencia a la cistitis. Además, es un buen complemento junto con el tratamiento antibiótico, acortando su duración y previniendo futuras recurrencias.
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Orissens Woman Íntima Balance: un gran aliado para reforzar la flora vaginal, especialmente útil cuando se producen alteraciones del flujo, molestias íntimas o hemos tenido infecciones recurrentes como candidiasis o vaginosis.
Piel, emociones y autoestima
El acné y otros cambios cutáneos son muy comunes durante la adolescencia. Estos no solo nos afectan a nivel físico, sino también emocional. Por eso, es importante abordar este aspecto con sensibilidad: acudir al dermatólogo, adoptar una rutina de limpieza adecuada y, sobre todo, no permitir que una piel con imperfecciones afecte a nuestra autoestima.

También es un momento de altibajos emocionales. Las oscilaciones hormonales, combinadas con los desafíos sociales, académicos y personales, pueden generar estrés, ansiedad o tristeza. Hablar con alguien de confianza, practicar técnicas de relajación y cuidar nuestro descanso son estrategias muy útiles.
Un mensaje para nosotras
Querernos empieza por conocernos. Entender lo que ocurre en nuestro cuerpo y cuidarlo desde el principio no solo nos ayuda a estar mejor, sino que nos da poder. Poder para decidir, para expresarnos, para afrontar cada transformación con seguridad.
La adolescencia no es fácil, pero también puede ser una etapa maravillosa si la vivimos con consciencia, acompañamiento y las herramientas adecuadas. Merecemos crecer sanas, informadas y libres de prejuicios. Merecemos que nos escuchen y que se respeten nuestros procesos.
Porque el camino hacia una vida plena comienza aquí, en este preciso momento de cambio. Y desde Orissens vamos a acompañarte, para ayudarte en todo lo que podamos.